Mi finde en el bafici, by Chavi

Bueno, amigos, me sumo al grupo comenzando con una impresión. Si bien el bafici con sus más de 400 películas siempre fue una mezcla de descubrimientos y bodrios (es inevitable), siento que desde el anterior y sobre todo en este, la cosa se pone cada vez más difícil a la hora de elegir películas. No más del 1% de nombres reconocibles, una guía cuyas sinopsis sirven más para el lucimiento del crítico que para la orientación del espectador, y sobre todo, una selección que abunda y destaca cada vez más en los títulos que eluden lo narrativo sin ofrecer mucho a cambio.

Directores fotógrafos, directores sociólogos, directores militantes y ahora tambien, directores alzados y adolescentes. Mucho cine de teens con dudas existenciales y búsquedas eróticas, mucho docudrama, poca invención narrativa y cinematográfica (la selección Nocturna pinta pobrísima, a juzgar por las sinopsis, y la de música -esto es un gusto personal- cada vez menos rockera). Tal vez por esto, mis ganas de maratonear en el bafici ya no son las mismas de otros años, y seguramente veré mucho menos. De todas maneras, sigue siendo para celebrar y bancar, esperando que en algún momento el cine y la crítica vuelvan a cambiar de rumbo y presten atención a lo que hoy no sobra, que son buenos autores. Y ojo muchachos de no caer en la bolsa de los que festejan cualquier bodrio comercial financiado por el INCAA para provecho de los canales de televisión, que las buenas intenciones no nos lleven a enbanderarnos detrás de Campanchella -brillante acepción de Mariano Llinás- o, peor, el cine de suar, jusid y cía.

Comenzamos por el viernes: arranca con Rivette, 36 vues du pic Saint Loup. Por suerte no son 35 vistas del Saint Loup en 35 planos fijos de 20 minutos cada uno. Se trata de una película corta de Rivette (una rareza, ya que suele hacer "largos largos", de 4 horas o más) que mezcla circo, teatro y cine, con un estilo bastante parecido a Rohmer, y una historia de amor y resolución de conflictos psicológicos muy endeble en su resolución. La peli es agradable hasta que Rivette experimenta los vínculos con el teatro, poniendo a los protagonistas a hablar en voz alta y relatarnos todos sus pensamientos, un recurso que al cine le sienta como una patada al hígado. Buena actuación de Sergio Castellito.

Sigo con Do It Again: documental sobre un periodista que quiere que vuelvan los Kinks, una banda que pudo ser tan grande como los Beatles y los Stones pero las peleas internas y el autosaboteo los dejó apenas con la categoría de banda de culto.
Para que vuelvan, el periodista tendría que lograr que los hermanos que lideran la banda se reconcilien, algo prácticamente imposible y bastante molesto si uno se pone en el lugar de ellos. Y eso es lo que es este periodista: un molesto... y un egocéntrico. Se entrevista con varios artistas (Sting, Robyn Hitchcock, Zooey Deschanel -que parece que sacó un disco-) y a todos los quiere obligar a hacer una canción de los Kinks juntos. Y a los espectadores nos obliga a escucharlo a arruinar la versión de cada invitado, porque el tipo es de madera y se anima hasta a los coros agudos. Más allá de eso, la peli está bien, es bastante divertida y tiene a Deschanel (El Fin de los Tiempos, 500 días con ella, Casi Famosos) más hermosa que nunca y contagiando entusiasmo. Y un Sting barbudo que parece rockero. Veanla que está buena.

Sábado: In the Shadows, sobre un tipo que hace un asalto a un camión blindado y se fuga. Es eso, nada más. Hay una chica y varios malos. Un par de escenas de suspenso bien hechas, y un intento de clima seco y minimalista que no termina de cuajar. El protagonista es un reloj pulsera (ni siquiera un cucú, que por lo menos sale y habla una vez por hora). No muestra una sola emoción, no dice nada demás, no hace más que lo necesario. Bastante decepcionante. Y por eso decidí, al surgir compromisos más interesantes, saltear las que pensaba ver el resto del sábado, Francesca -rumana- y "Un sourire no sé cuanto", cuya sinopsis no auguraba buenas experiencias: un tipo nos relata Los Pájaros de Hitchcock en el medio de un bosque y se escucha la banda sonora -que no tiene música- de la peli original. No se porque saqué entrada anticipadamente... supongo que extraño a Hitch.

Domingo: The Robber, similar a In The Shadows pero mucho mejor. Esta peli está en competencia, es sobre un tipo que practica atletismo y es el mejor de Austria (o Alemania, ya me olvidé). Tiene una mina pechugona interesada en él y no le resultaría difícil llenarse de plata con las carreras... pero tiene el pequeño problema de que le gusta robar bancos. Así, lo vemos entrenando en círculos en el patio de la prisión cuando arranca la película. Y esa gran escena, con tanta simpleza, nos resume el núcleo del film. Otra de protagonista bressoniano, de pocas palabras y mucha presición. Pero esta vez la narración es más fluida (si bien no destaca demasiado el manejo de la puesta en escena) y el guión más sólido que el de In The Shadows. Veanla si pueden, no es nada del otro mundo pero es lo mejor que ví hasta ahora, vale la pena ver al tipo correr, je. Para cerrar el finde me clavé con un bodrio llamado At the End of Daybreak. El director creo que es malayo, supuestamente un groso a seguir. Ojo que les adelanto toda la peli, ya que considero innecesario que se sometan a verla. Trata sobre chico pobre de veintipico que sale con chica rica de 15 y pico. Los papis de la nena son una hermosura. Acusan de abuso al chico y le piden guita a la madre pobre (que es BIEN POBRE). La madre del pibe es medio densa, muy encima del chico todo el tiempo, pero se humilla ante el ex marido y padre ausente del nene para pedirle que ponga la mosqueta. El padre -que la dejó por la hermana de ella- dice que lo va a pensar, mientras se tira el lance para robarle un polvo, que ella por suerte rechaza dos vecces. La madre finalmente paga el soborno, pero los papis de la nena -ya dije que son una hermosura de personas- deciden seguir adelante con el juicio. Esto no es todo, jeje. El pibe pobre, enamorado de la pendeja que desde que los padres se enteraron del noviazgo no le volvió a atender el teléfono, logra convencerla de que se encuentren acompañados de amigos y amiga respectivos. El pibe preocupado porque va a ir en cana, le dice a la nena que por favor interceda a su favor. La nena le dice (sic) que cuando no tenía cara de preocupado era más divertido. Que no lo quiere más. Y se manda a mudar. Merecidamente, el pibe la deja knock out de por vida. Y los amigos, completamente en pedo, se cargan a la amiguita. Hay más. Vaya a saber porque, al pibe le queda tiempo antes de huir para volver a casa y cagarla a golpes a la pobre madre, que si hasta acá había llorado bastante termina salpicando de lágrimas a los espectadores. Se veía venir desde el principio, una joyita de la crueldad. Uno de los primeros planos de la peli, muestra una rata enjaulada que se retuerce hasta la muerte mientras el muchacho protagonista le hecha una pava completa de agua hirviendo. La rata parece real, y su lenta muerte, sin cortes, también... no se si será trucada, pero a juzgar por las ideas del director vertidas en toda película, yo mandaría una visita de la sociedad protectora de animales. Si es que se ocupan de las ratas...

Hasta la próxima amigos! Quiero más críticas y recomendaciones en lugar de consejos y relfexiones! Hablemos de cine!

Chavi